"Cuando el olvido te olvida, sólo te deja una herida
perfecta con nombre y apellidos." -Eusebio Priego
Vientos perfumados de inmensidad de cielo,
bailan camino a donde se dividen pasos
donde se deciden finales impensables
donde se vislumbran mañanas tenebrosos.
No hay hombre consciente que abrace la muerte
a pesar de retos, de estudiada bravura
-suerte de ignorancia, impotencia y terror
inmenso que apabulla, ignorando señales.
De allá, los futuros fantasiosos caerán
y bajarán hasta el rehoyo más profundo
dejando carne pegada al despeñadero
es forzosa la putrefacción del tiempo.
No más viento, larga el olor, se apaga la luz
muerde una rabia sorda por permanecer
y se queda todo lo que pensamos tener
en el hoyo negro de la nada que llega.
Rufina
abril 11, 2019