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jueves, mayo 20, 2010

Voz, sangre, veneno+


Voz, sangre, veneno


El cuento no acaba nunca.
Quedaron conformes
con sólo el cambio de nombre
y se preguntan: "¿Ahora qué?",
con la absoluta certeza
de que no habrá respuestas.
Agridulce seudo-victoria 
que no ofrece soluciones
desde hace seis milenios.

Cada uno aporta lo que tiene
porque todo tiene un precio.
Voz que grita a los montes,
sangre que se vierte en agua,
veneno sembrado en la tierra.
Firmas de peso en papeles
que hoy son lija para sus culos.
Entre el vapuleo de nalgas
que se cambian por botellas...
¡Como se venden conciencias!
 
Así habrán de encontrarles:
por el criadero de moscas y el vaho
que piensan no ha de arroparlos
por el Divino arbitraje
de la Santa Mancha de Plátano
que traspasó la epidermis,
los músculos y huesos hasta el tuétano,
y sigue matándonos a pellizcos
sin haber servido de nada. 

El cuento no acaba nunca:
Orgullo patriotero, nube de polvo...
ruido y más ruido, orín en los zaguanes, 
grito a los montes, sangre en el agua,
veneno en la tierra...
¡Mierda y más mierda!

©Rufina